La Liga
Plataformas digitales de gestión para La Liga
Mediante el uso de Symfony, desarrollamos una plataforma para que la empresa pueda abordar la digitalización de sus flujos de trabajo.
El reto
Apoyamos a La Liga en la transformación digital de sus operaciones. Tanto en el ámbito de negocio, como en la relación con los empleados, la empresa abordó la digitalización de sus flujos de trabajo.

La Metodología
Un equipo de consultoría mantuvo diversas reuniones para conocer en detalle los flujos de trabajo que estaban detrás de las operaciones de la compañía. Aportamos ideas para hacer más eficientes esos procesos.
Nuestros diseñadores ilustraban esas ideas a través de prototipos que mostraban cómo la tecnología mejoraba los resultados.
La Solución
A través de la interacción con el personal de la compañía creamos nuevas experiencias de usuario que permitieron la transformación digital de las operaciones.
A medida que las aplicaciones eran aprobadas, un equipo de programadores de frontend abordaba el desarrollo e integración con el backend.
¿Hablamos?
Si necesitas desarrollar o mejorar tu negocio digital, cuenta con nosotros. Puedes escribirnos un mail a hello@digital55.com, llamarnos al teléfono 913 091 641 o rellenar el formulario que encontrarás más abajo.
Solución
La solución se basa en una arquitectura por capas bien definidas y separadas, lo que permite trabajar con mayor orden y eficiencia. Gracias a esta separación, cada componente cumple una función específica sin interferir con los demás, lo que facilita el mantenimiento, reduce errores al mantener aislada la lógica del negocio y permite escalar el sistema añadiendo nuevas aplicaciones cuando sea necesario.
Además, se optimiza el rendimiento general, ya que cada aplicación se enfoca en su tarea sin generar conflictos ni dependencias innecesarias. El mantenimiento implica un seguimiento post-implementación para asegurar el correcto funcionamiento, optimizar resultados y asistir al cliente en lo necesario.
Principales ventajas:
Mantenimiento post-implementación, para garantizar operatividad y optimización.
Menos errores futuros, gracias a la separación de la lógica del negocio.
Escalabilidad, al poder integrar nuevas aplicaciones fácilmente.
Eficiencia, asegurando que cada aplicación cumpla su función sin interferencias.